15 de julio de 2011

Field trip!

¡Buenas tardes!

En mi academia hacemos una "excursión" cada trimestre. En primero tocó la NHK, en segundo a ver Hakone todo nevadito, en tercero fuimos a Kappabashi a ver un poco cómo se hacen los platos falsos que se exponen en los restaurantes y este trimestre ha tocado ir a ver una obra de Kabuki. Inciso: para quien quiera saber qué es el Kabuki, su historia y tal... Lo siento, pero no soy una enciclopedia; para eso ya tenemos al pozo de la sabiduría (con cariño lo digo, ¿eh?)

El periplo ha tenido lugar en el Teatro Nacional de Japón (国立劇場 「こくりつげきじょう」) , donde al año se realizan muchas obras tanto de Kabuki como de otro tipo de teatro (por ejemplo el Noh). Prácticamente todo el resto de asistentes (y habíamos perfectamente unas 500 personas ahí metidas) eran niños o jóvenes japoneses que habían venido con sus colegios ya que, durante este mes de julio, antes de que empiece la obra uno de los actores explica al público la historia, qué representan los efectos de sonido que se oyen, por qué van así pintados los actores, etc.

Casi me alegré y todo de poder entender más o menos un 50% de lo que iba diciendo el hombre... ¡Craso error! Cuando empezó la obra me di cuenta que no entendería absolutamente nada. Haría como los niños pequeños cuando aún no saben leer: fijarme sólo en los dibujitos del cuento. Por suerte, como precavidos que suelen ser los japoneses, cuando te veían cara de ser más guiri que un alemán en Mallorca, a la entrada te daban un papelito con el argumento de la historia escrito en un perfecto (gracias a kamisama) inglés.

Así, la obra, llamada Yoshitsune Senbonzakura (義経千本桜 「よしつねせんぼんざくら」), trata de la huída de Minamoto no Yoshitsune. Después de la caída del clan Heike, supuestamente a manos de Yoshitsune, éste es acusado de traición por su hermano Yoritomo, por lo que tiene que huir con sus aliados hacia Kyûshû. Durante la huída en barco conocen a la familia Taira no Tomomori, encabezada por Ginpei, quien les hospeda en la posada que regentan él y su esposa.

Lo que no sabe Yoshitsune es que precisamente esta familia pertenecía al clan Heike y están deseando vengarse. Además, esta pareja es la que protege al emperador Antoku, el único heredero del clan Heike, que aún es un niño.

En una dura batalla en el barco entre los aliados de Ginpei y los de Yoshitsune, Ginpei es derrotado. Desesperada, su mujer intenta lanzarse al mar junto con el pequeño emperador, pero los aliados de Yoshitsune logran detenerla a tiempo.

Con la mujer capturada y el niño a salvo, Yoshitsune se dirige con ellos hacia la playa, donde Ginpei aún sigue luchando completamente solo y herido contra los aliados de Yoshitsune. Con el niño en brazos, Yoshitsune les promete que protegerá al pequeño emperador con todas sus fuerzas. La mujer, al oír esto, se siente aliviada y se suicida. Ginpei, también con alivio y sabiendo que Yoshitsune protegerá al emperador, se ata un ancla alrededor del cuerpo y se lanza al mar desde las rocas.

Y éste, resumiendo, es el argumento de la obra. Ahora, si me hacen ustedes el favor, ya pueden despertarse, levantar la cabeza del teclado y limpiarse la babilla que se ha ido cayendo. No pude hacer muchas fotos de la obra, además que no se veían muy bien, pero he aquí algunas fotitos para que se haga un poco más amena la entrada ^^


El vestíbulo del teatro


El escenario con el telón aún echado


Ginpei y sus aliados (anda que no echaban humo esas antorchas;menos mal que había un extractor de humos, que sino se hubieran puesto en marcha los "aspersores" que teníamos justo encima de nuestras cabezas xD)


Suke no Tsubone (la mujer de Ginpei) y el pequeño emperador Antoku (que aún no tengo claro si el actor de verdad era un niño o una niña...)


Yoshitsune y sus aliados viendo cómo Ginpei sube a las rocas para luego tirarse


Ginpei a punto de lanzarse al mar

La experiencia ha sido bonita, ver una obra de Kabuki tal y como se realizan desde hace casi 400 años, aunque si no entiendes muy bien el japonés te vas a enterar de poco (según me han dicho, ni los propios japoneses a veces entienden la obra...). Han sido casi dos horas seguidas sin entender absolutamente nada, bastante gente se ha quedado dormida (guiris y no guiris) y al final en lo único que pensaba es en cuánto quedaba para que Ginpei se suicidase de una puta vez... Pero, sin contar con mi absoluta ignorancia en el tema de las artes (lo siento, soy de ciencias), ha sido otra experiencia nueva e interesante que añadir a la pequeña lista que llevo.

¡Hasta otro día!