Vuelta al día a día

¡Buenas tardes!

Después de las vacaciones de Navidad, hoy mucha gente ha vuelto a la "vida real"; ha vuelto a su trabajo, a los estudios, ha empezado a poner en práctica los "buenos propósitos" para el año nuevo, aunque todos sabemos que a las pocas semanas la mayoría los deja por imposibles (o simplemente por ser vagos).

En mi caso se podría decir que es al revés, al menos en un 50%. Ayer fue, de momento, el último día que trabajé en el hospital. Ahora estoy a la espera de que me llamen para trabajar más días, aunque se ve que en esta época es algo difícil que te llamen. Y mañana vuelven a empezar las clases en la universidad, aunque seguramente no iré porque el lunes tengo un examen y aún me quedan muchas cosas por hacer.

También ha sido el día en el que empezaban las rebajas en la mayoría de comunidades (otras ya lo hicieron el día 2). No me puedo imaginar qué se les pasa por la cabeza a aquellas personas que esperan desde las 9h de la mañana a que abran las puertas de El Corte Inglés. Todos tenemos en la mente las típicas imágenes de cuando se abren sus puertas y una inmensa masa de gente entra corriendo para coger las "gangas" que antes costaban un poco más. ¿Es necesario comprar y comprar sólo porque está un poco más barato?:

- ¡Mira qué pantalones más bonitos! Y sólo me han costado 200€.
- ¿Cómo que "sólo" 200€?
- Sí, antes costaban 230€, ¡me he ahorrado 30€!

En fin, no comments. Volvamos al tema del fútbol, que el martes jugó el Barça. Después del empate con el Villarreal en Liga, les tocó jugar contra el Sevilla en la Copa del Rey, un equipo que desde la temporada pasada lleva demostrando por qué es uno de los importantes en la Liga española. ¡Y vaya si lo demostró! Es cierto que el Barça, como ya todo el mundo sabe, es un equipo muy fuerte y que ha hecho historia, pero no debemos olvidar que a veces también puede perder.

Aprovechando que se emitía en abierto (por la TV3, la autonómica catalana), mientras cenaba veía el partido pese a las quejas de mi madre (no le gusta el fútbol, y mucho menos el Barça xD). El Barcelona salió con un once un poco peculiar, con casi todos los habituales en el banquillo: Puyol, Xavi, Piqué, Ibra, Henry, Busquets... Las rotaciones de Guardiola dieron minutos a algunos que hacía tiempo que no tenían, como a Bojan, aunque no se dejó ver tanto como lo hacía antes.

Empezó el partido y los dos equipos iban a por todas. Constantes llegadas del Sevilla a la portería de Pinto, que suele jugar todos los partidos de Copa, y otras muchas del Barça a la portería de Palop, que fue continuamente abucheado por perder tiempo cada vez que le llegaba el balón a las manos. Pese al constante "toma y daca" de los dos equipos, ninguno consiguió marcar. Lo único que consiguieron fueron algunas tarjetas amarillas de Pérez Borrull, que ese día tenía la mano un poco suelta.

Llega el inicio de la segunda parte y Guardiola decide hacer entrar a Ibra a cambio de Pedro, un buen jugador, como ya ha demostrado muchas veces, que ayer no estuvo muy visible en el campo. El Sevilla continuó atacando, y en una de sus acciones consiguió llegar a la portería blaugrana y marcar; Capel puso el 0 a 1 en el marcador.

El Barça siguió en su línea y en el minuto 70 Bojan logró marcar desde el área pequeña del Sevilla, pero el árbitro decidió anularlo por una supuesta falta de Ibrahimovic; falta que luego se vio que no era, ya que prácticamente ni toca al jugador contrario. Aun así, Zlatan se quitó la espinita y a los dos minutos hizo un golazo como sólo los sabe hacer él; tras superar a Palop, que estaba un poco alejado de la portería, cruzó el balón y lo encajó al fondo de la red.

Bueno, un empate no estaba tan mal, aunque todavía quedaban suficientes minutos por delante como para marcar y proclamarse vencedores. Pero esta alegría duró poco, ya que sólo un minuto después, en un ataque sevillista, Chygrynskiy cometió falta dentro del área (aunque la acción comenzó fuera del área, pero bueno). Pues nada, penalty a favor del Sevilla y todo el mundo rezando a Pinto para que lograra pararlo. Pero, aunque Pinto se tiró bien, no pudo detener el esférico.

Uno a dos a favor del Sevilla, ¡hay que remontar! Pero los minutos siguieron avanzando y el Barça no lograba marcar pese a intentarlo. El árbitro, que más vale que se hubiera quedado en su casa, pitó el final del partido y el Sevilla se proclamó ganador, dejando a los blaugrana con la difícil, pero no imposible, tarea de ganar por 2 goles en el partido de vuelta en el Sánchez Pizjuán.

Pero lo que me fastidia soberanamente son los comentarios de los periodistas que se han hecho después del partido: tropiezo del Barça, aún no ha ganado en el nuevo año... Sí, el Barça perdió, ¿y qué? Como aficionada culé me jodió que perdieran, eso no voy a negarlo, pero no podemos pretender que ganen absolutamente todos los partidos que juegan. Sí, es el Barça que la temporada pasada consiguió el triplete; y sí, también es el Barça que ha hecho historia con las seis copas del 2009. Hay que ser realistas y admitir que sería algo bastante difícil (aunque sería muy gratificante) que el Barça volviera a ganar las tres competiciones que ahora le quedan. Son humanos, no superhombres, y sigo recordando que en Liga aún no han perdido ni un solo partido y que siguen líderes en la tabla.

En fin, lo dejaremos por hoy, que ya me he despachado a gusto xD.

¡Hasta otro día!