3 de marzo de 2010

Ya viene la primavera

¡Buenas tardes!

Como aquellas conversciones que surgen en los ascensores con nuestros vecinos, cuando no sabemos bien qué decir, siempre se acaba hablando de la meteorología; ¿por qué será? Pues pensando en eso, me acaba de venir a la mente que dentro de casi tres semanas ya comienza la primavera, que la sangre y las hormonas altera. Cuando piensas en ello te das cuenta de que hace sólo unos meses estabas en la playa, tomando el sol y relajándote con tus amigos o familia, y piensas que qué rápido pasa el tiempo.

Y pensando en esto, mientras suena The show must go on de los magníficos Queen, dentro de algo más de un mes y medio cumpliré 24 años... ¡Ahora sí que digo "qué rápido pasa el tiempo"! Pensar que parece que fuera ayer cuando acabamos todos llorando porque terminábamos sexto de primaria y nos separaríamos; o empezar en el instituto, aquel lugar misterioso que no sabíamos qué nos depararía; o cuando en segundo de bachillerato me dijeron que iba a repetir... Bueno, esto último no fue una sorpresa, porque ya lo tenía clarísimo (es lo que tiene no estudiar y ausentarse de muchas clases xD), y así también me iba adaptando para cuando al año siguiente me dijeran que repetía otra vez xD Pero a la tercera va la vencida, ¿no? xDD

Cuando eres pequeño te imaginas a una cierta edad con una vida determinada. Cuántos niños y niñas se habrán imaginado que acabarían siendo maestros o policías, que a los 21 ya se habrían independizado, que tendrían un trabajo fijo en lo que a ellos les gustara... ¿Cuántos de esos niños y niñas habrán cumplido esas expectativas?

Yo, sinceramente, no me acuerdo de cómo me imaginaba a los 24 años, por ejemplo. Si lo pienso, tampoco me puedo quejar mucho: he acabado los estudios de Enfermería, trabajo como enfermera (quizá no tanto como me gustaría), entré en mi soñada Licenciatura de Estudios de Asia Oriental, he hecho viajes donde he conocido a buena gente, tengo tiempo libre para estar con mis mejores amigos y mi familia... Pero, no sé, llevo un tiempo pensando que me falta algo. Es una sensación rara que va y viene, según le parece, y unos días hace que esté contenta y otros que me replantee si de verdad es ésta la vida que yo quiero y que había imaginado que tendría. Es una especie de sentimiento de vacío que no sé cómo llenar; supongo que tendré que seguir buscando hasta que encuentre algo o alguien que lo cubra. Cuando veo a mis amigos, o simplemente a la gente que me cruzo por la calle, me pregunto si de verdad son felices. Aunque la pregunta más bien sería si se puede ser completamente feliz en la vida...

En fin, mientras encuentro la respuesta, me voy a estudiar japonés, que seguro que dentro de poco tendré un examen xD.

¡Hasta otro día!

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