12 de abril de 2010

Cantera de oro y platino

¡Buenas tardes!


Ah, qué buen domingo de solecito. Seguro que mucha gente está en la playa intentando pillar los primeros rayos de sol para broncearse y lucir algo de morenito ahora que cada día queda menos para el verano. Pero no os confiéis, porque los meteorólogos han dicho que a partir de mañana lunes caerán algunas gotitas del cielo, por eso de cumplir el refrán de "en abril, aguas mil".


Y hablando del mes de abril, me acabo de dar cuenta que quedan sólo nueve días para mi cumpleaños. Veinticuatro años ya; cómo pasa el tiempo, ¿no? Pero, como digo muchas veces, sería peor no cumplir años, y además dicen que cada año, aunque tú no lo notes, eres un poquito más sabio que el anterior. Qué nos deparará el futuro eso no lo sabe nadie, así que hay que vivir saboreando cada día de tu vida, sin remordimientos y aprendiendo de los errores que uno, queriendo o sin querer, comete.

Después de este arrebato filosófico y quizá sin sentido (a veces me pasa xD), hablemos del significado del título de esta entrada. Como todos bien saben, aunque aborrezcan el fútbol, ayer se jugó el "Clásico" que enfrenta a quizá los dos equipos más conocidos de la Liga española: Barça y Real Madrid.

El escenario de este partido de vuelta fue el Santiago Bernabéu, que congregó a unos 80.000 aficionados merengues y a poco más de 600 culés; es decir, que el estadio estaba completamente abarrotado. Como dije en la entrada anterior, este era un encuentro muy importante para los dos equipos, ya que estaban empatados a puntos y sólo les separaban un gol a favor de los madridistas. El Madrid salió con todas sus estrellas, pero el Barça no quiso ser menos. Echando mano de sus grandes jugadores, la plantilla blaugrana se compuso en gran parte, como ya es habitual, por futbolistas sacados de la cantera: Messi, Pedro, Valdés, Xavi, Iniesta, Puyol, Piqué, Sergio Busquets...

Viendo el partido en casa de unos amigos, nos aprovisionamos de comida y bebida y disfrutamos del juego del Barça. Es cierto que los merengues tuvieron varias ocasiones para marcar, pero ahí estaban el capitán, Carles Puyol, y Gerard Piqué (que trajo un poco de cabeza a Cristiano) defendiendo el área blaugrana; además de Víctor Valdés, que desde hace ya mucho tiempo está demostrando que es un muy buen portero.

El marcador lo abrió, como no podría ser de otra forma, Lionel Messi. Después de uno de los magníficos pases de Xavi Hernández, Leo logró batir a Casillas tras un perfecto regate a la defensa madridista y controlando el balón con el pecho. Lo único que pudo hacer nuestro capitán de Selección fue observar cómo el esférico se colaba dentro de la portería y hacía a Messi posicionarse aún más como pichichi de Liga, con 27 goles.





El segundo y definitivo gol del partido vino de las botas del hasta hace poco canterano Pedro Rodríguez (por favor, insisto en que no se le llame más 'Pedrito', que ya tiene unos cuantos años para eso xD). Logrando otra vez batir a la defensa madridista, otro estupendo pase de Xavi (lo que no haga él no lo hace nadie) propició que Pedro pudiera estrellar el balón en la portería de Íker y así sentenciar un partidazo que estuvo marcado por la superioridad de juego del Barça.




No obstante, creo que es de justicia partir una lanza a favor del Madrid. Quizá ayer no hicieron el mejor partido de su historia, pero no hay que olvidar que estamos hablando del Real Madrid, un equipo mundialmente conocido y reconocido que hasta hace poco estaba primero en la clasificación y que está plagado de buenos jugadores. Sobre todo destacar a Íker Casillas, en mi opinión uno de los mejores porteros del mundo (por no decir el mejor), que logró detener dos goles seguros de Messi con las estupendas paradas a las que nos tiene acostumbrados en su equipo y en la Selección.


Sí, ayer se hizo un paso muy importante y muy grande para poder ganar la Liga por segundo año consecutivo, pero quizá la gente no se ha dado o no se quiere dar mucha cuenta de que aún quedan siete jornadas por delante y que, como repito hasta la saciedad, en el fútbol puede pasar cualquier cosa. Además, el Barça sigue vivo en la Champions y tendrá más partidos que jugar que el Real Madrid. Por supuesto que hay muchas esperanzas de ganar los dos títulos y más si siguen jugando como lo llevan haciendo hasta ahora, les estaremos animando hasta que nos quedemos sin voz, pero no hay que vender la piel del oso antes de cazarlo.


Y con esto y un bizcocho, me despido por hoy.


¡Hasta otro día!


PD: Fotos extraídas de La Vanguardia.

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